Los exámenes ocupacionales se realizan con el fin de monitorear la exposición a factores de riesgo e identificar en forma precoz, posibles alteraciones temporales, permanentes o agravadas del estado de salud del trabajador, que se asocien al puesto de trabajo y los estados pre patológicos.

Los exámenes ocupacionales pueden incluir una variedad de pruebas y evaluaciones, dependiendo de los riesgos laborales asociados con el trabajo realizado por el empleado y los requisitos legales o corporativos. Estas pruebas pueden abarcar desde evaluaciones médicas básicas, como revisión de antecedentes médicos y examen físico, hasta pruebas específicas, como evaluaciones de la audición, visión, función pulmonar, evaluaciones de exposición a sustancias químicas o tóxicas, y pruebas de aptitud física.

La frecuencia y el alcance de los exámenes ocupacionales pueden variar según el tipo de trabajo, la industria y la legislación laboral local. Estos exámenes son llevados a cabo por profesionales de la salud especializados en medicina ocupacional y salud laboral, quienes evalúan la capacidad del trabajador para desempeñar sus funciones laborales de manera segura y saludable, y proporciona recomendaciones para prevenir lesiones y enfermedades relacionadas con el trabajo.